Segundo día de la expedición y primera batalla perdida. Parte de nuestro destacamento se está quedando con pocos suministros. Quizás parte de la culpa es suya, por no administrarlos bien, pero estos parrisis son muy listos y los han hecho caer en sus trampas, con sus luces, su música… Sus cantos de sirena.
Son tácticas para las que no habíamos entrenado y se ha notado en algunos casos.
A pesar del madrugón de la tropa, otra vez el Dios Cronos estaba en nuestra contra. Nos esperaban en el puesto de control muy temprano y nos fue imposible llegar. Se trataba de unas maniobras muy importantes de cara a una hipotética batalla, pues Versalles es un punto estratégico desde donde podemos lanzar la batalla final.
Hasta ahí todo bien, pero por la tarde nos prepararon una emboscada. Fue terrible. Nos obligaron a enrar por un desfiladero, nos rebuscaron las armas, encontramos vigilancia en cada rincón, trileros ofreciendo sus servicios dispuestos a vaciarnos los bolsillos… Manjares exquisitos para llenarnos la panza y hacer imposible la huida… Lo tenían todo preparado.
Finalmente pudimos escapar y, aunque con el ego maltrecho, retirarnos a nuestros aposentos a reflexionar y a pensar en el día de Mañana.
Pues Versalles parecía que iba a ir mal, pero se arregló. Otra pega en el metro. Me dicen que con 45 niños, obligatorio 5 profesores (ni soñando). Me dio los billetes pero que si me paraban, era mi responsabilidad. No me deja la Consejería 5 profesores ni yendo a Groenlandia.
Al final llegamos con casi una hora de retraso. El tren iba a reventar. Para salir de la estación, más de 20 minutos porque revisaron los billetes al bajar del tren. Mi sorpresa fue cuando llegué a la caja de grupos y ahí no había cola. Me dieron las entradas (mirándome mal por el retraso) y entramos directamente. Lo que sí cambió fue el tema de las audioguías, que siempre me las daban gratis y ahora tenía que pagarlas. No pedí el pase “derecho de palabra” para hacer de guía porque pensaba cogerlas y no podía ir dando las pequeñas charlas que me sé ni las que me invento ni las que mezclo realidad y ficción (ellos se las creen todas y no confirman nada). Versalles era una antigua casita de campo, de caza, de la realeza. Luis XIV, en su locura por ser el más grande de la historia (tendría trauma por su altura) hizo allí el palacio más grande y majestuoso de Europa, y con el que arruinó a todo un país. Les dijimos que por lo menos pensaran lo que estaban pisando, cientos de años de historia, millones de personas han desfilado por esos suelos.
Nos volvimos a almorzar al pueblo de Versalles y les dimos un rato libre. Casi todos fueron al KFC o Mcdonald’s y un grupito se sentó en un restaurante y se comieron unas pizzas por 11€.
Nos volvimos en el tren (más vacío) hasta la “Foire du Trône”. Ya fue el desmadre padre y la locura. Entraron ya con la boca abierta. Son 10 hectáreas de feria con 350 atracciones… Casi ná.
Llegamos sobre las 5 y les dimos 3 horas libres para montarse, bajarse, jugar, comer todo lo que quisieran. Nosotros estuvimos tomando un refrigerio y dimos algún paseo y casi no los vimos. Los que nos encontrábamos nos hablaban de las atracciones en las que se habían subido como si del mismísimo cielo se tratase.
A pesar de las 3 horas, concedimos 30 minutos más y algunos ya cenamos allí.
Vuelta al hotel en el metro y a descansar si podemos…
COSAS QUE PASAN
Ayer paseando, se escucha de fondo la música de “La Vie en Rose”.
- Profe, para…. Se oye el himno del Barça.
Hoy por la mañana hacía más frío que ayer (unos 12 grados al salir). Los avisamos y… Tachán: 3 en pantalón corto, camiseta sin mangas, otros de manga corta sin chaqueta…
La palabra del mes: PROFEEE (así, alargando la “e”)
- Profeee, ¿Donde vamos?
- A París.
- Ya estamos en París
- Pues ya hemos llegado.
- Jooooo… dímelo.
- Lo expliqué esta mañana y lo tenéis el blog.
- Ya lo leí…. Pero es que no me acuerdo.
Os dejo aquí fotos y algún vídeo. Quizás no salgan ordenadas, pero se hace tarde y me estoy durmiendo…
Una camita para la Reina
Un pequeño resumen de algunas atracciones… No sé si había de nuestra gente subida…
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