Nada que reseñar hoy.
En el avión incluso pudimos dormir. Un par de veces avisaron de que no estuvieran de pie, pero fue bastante bien.
Para buscar la guagua se complicó un poco la cosa. Tuvo que aparcar lejos, nos dijo que teníamos que coger una guagua del aeropuerto (que bnos costó 4 euros) y nos dejó en otro sitio más lejos la tuvo que venir nuestra guagua a buscarnos… Pero bueno, pedazo de guagua de dos pisos de lujo…
Tras repartir las habitaciones salimos a dar una vuelta por el barrio y confirmamos lo que sospechábamos: sitio chunguillo.
Fuimos a cenar por los alrededores de la estación de tren (algunos en la estación, donde conocieron la flor y nata de Bruselas) y a la cama.
Quejas hoy: 17
Motivos: hay que pagar por todo, qué caro, nos cobran por respirar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario